La imaginación no es algo banal, ingenuo o romántico. Es la principal instigadora de alternativas políticas y urbanas que podemos poner en marcha y que nos permiten hacer frente a los retos actuales.
Imaginar en torno a la realidad para encontrar posibilidades de transformación que no dependan de las crisis; imaginar cuerpos y ecologías; permitirnos otras prácticas que no sean las programadas por los poderes dominantes; indagar en los posicionamientos de los márgenes y dejar que sus propuestas prosperen. Si tu no eres consciente de los imaginarios que te mueven, alguien los fabrica por ti sin que puedas cuestionarlos.
La revolución somática utiliza la conciencia de los imaginarios que nos mueven y los transforma acorde a las posibilidades de pensar juntas — las diversas formas de vida — con nuestra multiplicidad de carne interespecie.

El sábado estuvimos hablando de imaginarios urbanos a raíz del ciclo que durante el mes de abril han programado en @cinezeta (si no concéis lo que hace este grupo de jóvenes entre 18 y 26 años en @cineteca tenéis algo fantástico por descubrir)
Fue un placer conversar con personas tan comprometidas, vitales y curiosas por la vida y el conocimiento en todos sus aspectos. ¡Felicidades @punzadass@marmtrdz , Sandra y el resto del equipo por crear tantos espacios para imaginar y hacer cambios juntas!